Cuando Abraham Lincoln trabajaba de abogado, no se dejaba tentar
Cuando Abraham Lincoln trabajaba de abogado, no se dejaba tentar
por cuotas faciles e intentaba evitar juicios innecesarios. Pero en
cierta ocasion le visito un hombre queriendo demandar a un acreedor que
le debia dos dolares y medio. Lincoln intento disuadirle, haciendole ver
que, incluso ganando el juicio, sus honorarios como abogado ascenderian
a diez dolares, que tendria que pagar el demandante; sin embargo, su
cliente estaba tan determinado a vengarse que iba a buscar otro abogado
para iniciar el pleito, asi que finalmente Lincoln accedio a
representarle. Tras cobrar los diez dolares, Lincoln dio cinco al
demandado, que en un rapido juicio reconocio su deuda y pago los dos
dolares y medio. (The Little Brown Book Of Anecdotes, editado por
Clifton Fadiman.)
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